Una vez mas hablamos de las herramientas del lean manufacturing. En esta ocasión hablamos del SMED.
Para comenzar diremos que SMED es el acrónimo de «Single Minute Exchange of Die» que lo podemos traducir por «cambio de herramientas en un solo dígito de minutos«. Esto quiere decir que, en general, los cambios de proceso, maquinaria o herramienta deben de realizarse en menos de 10 minutos.
Aquí es importante señalar lo que entendemos por el tiempo de cambio, y es el tiempo que trascurre entre la fabricación de la última pieza correcta de la referencia antes del cambio de máquina herramienta o proceso, y la primera pieza correcta después del cambio de máquina, herramienta o proceso.
Para hacer los cambios de referencia se necesitan llevar a cabo una serie de operaciones. Algunas de estas operaciones serán internas y otras serán externas. Entendemos por operaciones internas, aquellas que se han de realizar con la máquina parada, sin producir. Mientras que las operaciones externas son aquellas que se pueden realizar con la máquina en funcionamiento.
La aplicación de la herramienta SMED se suele llevar a cabo en 4 fases:
- Identificar las operaciones que se realizan, distinguiendo cuales son operaciones internas y cuales son operaciones externas.
- Una vez que tengamos diferenciadas ambos tipos de operaciones hay que proceder a separarlas
- Tratar de convertir el mayor número de operaciones internas en operaciones externas.
- Optimizar todas estas operaciones al máximo.
En la imagen siguiente, del ingeniero Fabián Ortega, se resume bastante bien lo que hemos indicado en el párrafo anterior
Con el SMED conseguimos:
- Posibilidad de producir lotes mas pequeños sin que tengamos una variación en el coste
- Reducción del inventario
- Reducción de las mudas o despilfarros
- Se mejora el tiempo de entrega del producto
- Aumentamos la flexibilidad en la planta de fabricación
Como aplicación práctica de la herramienta SMED, se suele poner el ejemplo de los cambios de ruedas que se llevan a cabo en la fórmula 1. donde cada una de las operaciones están estudiadas al detalle para ganar esas décimas de segundo que son tan importantes para los pilotos y sus equipos. Aquí podemos ver un vídeo muy ilustrativo donde además de ver el ejemplo de la fórmula 1, podemos ver otros ejemplos que nos van a llevar a entender mucho mejor la herramienta SMED.
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