0

Fase 5: Seguimiento y Control

Como quinta fase del proceso de consultoría tenemos el seguimiento y control. Se desarrolla aquí mas en profundidad esta fase del proceso de consultoría.

Podemos hacer el símil que la fase de seguimiento y control en un proyecto de consultoría es como el faro que tiene que guiar el barco hacia su meta. Es una fase en la que observamos de cerca la implementación de las estrategias y nos toca ajustar el rumbo si fuese necesario para llegar a los objetivos establecidos.

Evaluación continua: cuando estamos tenemos las estrategias en proceso de ejecución, la evaluación constante se convierte un proceso clave. Se debe de hacer un seguimiento constante de los indicadores clave (KPI´s), permitiendo una medición objetiva del progreso hacia nuestras metas. Esta fase es muy dinámica, donde los datos obtenidos se convierten en una guía para tomar decisiones.

Análisis en tiempo real: el seguimiento no solo tiene como misión la recolección de datos, el seguimiento también implica análisis continuo. El identificar las desviaciones entre los resultados esperados y los resultados que estamos logrando es esencial para poder realizar los ajustes y/o correcciones que sean necesarias durante el transcurso del proyecto.

Flexibilidad y adaptabilidad: la capacidad que se tenga de adaptarse es clave. Si los indicadores nos están diciendo que la estrategia no está dando los resultados que estábamos esperando, el equipo debe de ser lo suficientemente flexible para ajustar el enfoque de la consultoría sin comprometer los objetivos finales

Comunicación y Transparencia: Como ya se ha indicado en post anteriores, una comunicación transparente y abierta entre los equipos de la consultora y de la empresa es esencial y mas en esta fase. Esta transparencia asegura que cualquier desafío o cambio se va a identificar y por tanto abordar rápidamente, manteniendo a todos en la misma sintonía con el progreso y las decisiones tomadas.

Tomar acción y mejorar continuamente: en la fase de seguimiento y control no solo se trata de observar, también hay que actuar. Si identificamos las áreas que necesitan ajustes, se deben de tomar medidas rápidas y efectivas para rectificar el rumbo y asegurar que se alcancen los objetivos de manera eficiente.

El valor de la reflexión: Además de la acción inmediata, esta fase de consultoría, también brinda la oportunidad de reflexionar sobre el progreso general del proyecto. Este análisis mas profundo permite aprender de las experiencias, fortalezas y debilidades encontradas durante la ejecución.

Como resumen me gusta decir que esta fase de consultoría es el timón que dirige la nave hacia el logro de los objetivos.

Angel Antonio Romero

Soy Ingeniero Técnico Industrial

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *